May | 04 | Cinco abejas de la colmena de Dios

Palabra para meditar – PRUEBA

1 Juan 4:1
“Queridos hermanos, no crean a cualquiera que pretenda estar inspirado por el Espíritu, sino sométanlo a prueba para ver si es de Dios, porque han salido por el mundo muchos falsos profetas.” .

Cinco abejas de la colmena de Dios

El padre de (James) Joseph Jacques Tissot no estaba nada feliz de que su hijo quisiera ser pintor. Sin embargo, James, que es el nombre anglicanizado de este pintor francés, se aseguró de hacerle tragar tanto sus palabras como sus preocupaciones, convirtiéndose en un “pintor empresario” muy famoso.

Tissot nació en la costa francesa, en Nantes, y estudió en la École des Beaux-Arts de París teniendo como maestros a Ingres, Flandrin and Lamothe. No obstante, pintando ya con éxito a elegantes mujeres francesas, Tissot cambió de profesión por un tiempo al irse a luchar en la Guerra Franco-Prusiana. Después de su regreso y sin que pasara mucho tiempo, bajo una nube secreta salió de París y se fue a Londres, donde estudió grabado con Sir Seymour Haden y dibujó caricaturas para Vanity Fair, mientras a la vez pintaba lo que para la época eran considerados unos retratos muy “escandalosos”. En algún momento finalizando la década de 1870, Tissot conoció a la señora Kathleen Newton, una mujer divorciada, quien se convirtió en su compañera y en la modelo de muchos de sus trabajos. La señora Newton que tenía casi la mitad de su edad, se mudó a la casa de Tissot en 1876 y vivió con él hasta que alcanzó las últimas etapas de su tuberculosis, momento en el que se suicidó contando apenas con 28 años. Tissot quedó devastado. Vendió su casa en los Bosques de San Juan y regresó a Francia para retomar lo que mejor hacía: retratos de mujeres elegantes.

Tissot, ahora de regreso en Francia, se encontró con un médium o ilusionista, el señor William Eglinton, quien pretendía poder hacer manifiesto el espíritu de Kathleen, su amante fallecida y madre de su hijo bastardo. Tissot quedó tan impresionado que pintó la escena de “L’apparition Medianimique”, que durante muchos años después estuvo colgada en las oficinas de la Alianza Espiritual de Londres. ¡Ah! Pero para que no piensen que Tissot era un tonto, hay que tener en cuenta que hasta el Primer Ministro de Inglaterra, el mismo Gladstone, fue inducido/seducido por Eglinton para que fuera parte de las primitivas áreas de la actividad paranormal investigativa. Como a propósito también lo hizo Sir Arthur Conan Doyle y muchos, muchos más. Sí, tienen que entender que en el momento de este gran cambio de épocas, el uso de los médiums estaba muy difundido en Europa.

Entonces Tissot, habiendo abandonado la iglesia Católica Romana y estando de visita en una iglesia local para buscar inspiración, sería capturado literalmente por una “visión de Jesús cuidando de los pobres”. Esta visión en la iglesia le dio un vuelco total a su vida y, a pesar de que sus contemporáneos pensaron que esta “conversión” dramática en esa etapa tardía de su vida era una estratagema grandiosa para hacer dinero, Tissot no obstante efectivamente pasó los últimos 10 a 15 años de su vida, más que cualquier otro gran artista, inmerso total y completamente en los Evangelios; y gracias a sus viajes al Medio Oriente, también se sumergió plenamente en el paisaje geográfico y social de la Biblia. Desde esta posición de inmersión total, Tissot pudo entonces producir probablemente por vez primera y con un realismo absolutamente vívido y sensacional, algunos cientos de cuadros relacionados con imágenes iconográficas de la vida de Cristo. Es en verdad magnífico, y más de cien años después de su primera publicación, ¡es aún un galardón para cualquier biblioteca! De hecho, por un precio de regalo, en una librería de caridad elegí dos libros de Tissot, de una obra de cuatro volúmenes.

Tissot, totalmente absorto y habiendo reunido toda su información, aún necesitaba lo que él denominaba “la iluminación de la intuición”, de la cual en su autobiografía decía, había sido agitada por cierta receptividad inducida. De hecho, era como si hubiera sido ungido con hiperestesia, quedando así, excepcional y exacerbadamente sensible ante cualquier estímulo espiritual que hubiera sido evocado a través de ciertos objetos materiales del exterior. Por supuesto, él alegaba que eran la meditación y la apertura de su mente a tales emociones, las que le habían traído resultados tan prolíficos y sorprendentes en sus pinturas y dibujos.

Ahora, menciono todo esto esta noche porque Tissot no sólo se sumergió con toda razón en hechos físicos, sino también en el Misticismo Católico Romano, incluso llegando a consultar las visiones de Santa Anne Catherine Emmerich, cuyas visiones, a propósito, también fueron consultadas por Mel Gibson para su película, La pasión de Cristo. Sí, Tissot, a través de estas asociaciones religiosas y místicas y también de sus asociaciones de conexión con el Movimiento primitivo de la Nueva Era en la persona de Eglinton, nos evoca algunas de las imágenes del movimiento místico-carismático presente, postmoderno y terapéutico.

Ahora, siendo yo mismo en la actualidad un creyente de la existencia y de la función de los ministerios quíntuples y de los dones del Espíritu Santo, me parece importante para mí, y creo que para todos los que se mueven en la esfera espiritual, y de hecho, incluso para todos nosotros los artistas que buscamos inspiración y también para los ministros que buscan poder y movimiento, que entendamos la diferencia entre los males del espiritismo o la adivinación, y las bendiciones de la creación receptiva y de la instrucción profética. Es decir que aun al estar en contacto con las realidades tanto espirituales como materiales, debemos ser capaces de evitar cualquier falsa intrusión o control manipulador de seres, que aunque puedan tener ojos angelicales, también tienen los corazones más fríos y lúgubres. En otras palabras, la pregunta para nosotros es, ¿cómo podemos estar abiertos a la iluminación, la revelación y la instrucción de Dios Espíritu Santo, y al mismo tiempo permanecer cerca de una posible intrusión demoníaca? Créanme, si ustedes están moviéndose conscientemente dentro de la esfera espiritual, ¡esto es muy importante!

Las cinco salvaguardas básicos para aquellos cristianos que son tanto conscientes como osados para moverse en el ámbito espiritual, son: El Libro, Los Creyentes, El traje de Batalla, Los Residuos del pasado y las Bendiciones del presente.

El Libro, por supuesto, es la Biblia. Devórense ese libro y dejen que los consuma por completo. Conózcanla la Biblia, declámenla, cítenla, muévanse en ella, repítanla y dejen que ella los gobierne.

En segundo lugar, “¡Anden con creyentes!”. Que ellos, junto con cada uno de ustedes, sometan a todo espíritu que hable a la autoridad de Palabra de Dios. Pruébenlos. Juntos. En todo tiempo.
Tercero, “Pónganse el traje de batalla”. Tomen la espada, el escudo y la armadura, para cada área para la cual se les ha proveído de protección, porque tengan la seguridad que cada una de esas áreas, ¡será, sin lugar a dudas, atacada con toda ferocidad! Consigan algunos amigos que, con ustedes, hagan frente hombro a hombro, y busquen a otros incluso más valientes que no duerman mucho, para que cuiden sus espaldas durante cualquier ataque en el que se vean envueltos.

Cuarto, “Estén atentos a los residuos del pasado”. Las cosas que no hemos resuelto de nuestro pasado, suelen constituirse en puertas abiertas que nos exponen a ser “visitados” nuevamente. Estén atentos a cualquier residuo del pasado y hagan todo esfuerzo posible para cerrar las ventanas y las puertas que todavía estén abiertas en su propia casa espiritual. Algunos de ustedes aún tienen desalojos por hacer.

Finalmente, “Regocíjense con las bendiciones del presente”. Los Dones del Espíritu son para la edificación presente de los santos que viven en la luz, mientras estén revestidos con la armadura y estén caminando por el Camino Más Excelente del Rey. Utilícenlos y utilícenlos bien.

Medita: “En esto pueden discernir quién tiene el Espíritu de Dios: todo profeta que reconoce que Jesucristo ha venido en cuerpo humano, es de Dios; todo profeta que no reconoce a Jesús, no es de Dios, sino del anticristo. Ustedes han oído que éste viene; en efecto, ya está en el mundo. Ustedes, queridos hijos, son de Dios y han vencido a esos falsos profetas, porque el que esta en ustedes es más poderoso que el que está en el mundo.” 1a Juan 4:2-4

Ora: Señor, envía estas cinco abejas de tu colmena, para que me libren del engaño y piquen de muerte a los espíritus que puedan traer engaño y mentiras. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.