Saturday, February 19, 2011

Feb | 19 | El problema con los canarios complacientes

Palabra para meditar – CANTA

Salmos 40:1-3
Puse en el SEÑOR toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor. Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme. Puso en mis labios un cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Al ver esto, muchos temerán y pondrán su confianza en el SEÑOR.

El problema con los canarios complacientes

Los productores de vino sudafricanos están en estos momentos cultivando rosas entre sus viñas: si las rosas muestran signos de manchas negras de hongos, los productores pueden tratar a sus viñedos de mejor manera y con más anticipación que antes. En este caso, la rosa se ha convertido en el signo de advertencia temprana de lo que podría significar la total destrucción por hongos del cultivo de la uva.

Fue en 1986 cuando los últimos 200 canarios fueron despedidos de las minas de carbón británicas. Por muchos años, estas aves cantoras de colores brillantes habían sido utilizadas para probar la calidad del aire en las minas. Los canarios eran particularmente sensibles a la presencia del monóxido de carbono y al metano, por lo que mostraban signos visibles y notables de que algo estaba mal, mucho tiempo antes de que los mineros se dieran cuenta de que había peligro. A veces cuando esto sucedía, los canarios dejaban de cantar, o se hamacaban hacia atrás y hacia adelante en sus varillas, o caían al fondo de sus pequeñas jaulas y, en ocasiones, morían. Afortunadamente, la nueva tecnología digital finalmente reemplazó a los amigos emplumados de los mineros.

Para aquellos que pueden ver y sentir, siempre hay señales de alerta antes de una destrucción que viene. Mucho puede decirse de este fenómeno tanto global como localmente, tanto material como espiritualmente, pero en esta noche quiero hablar solamente de forma personal, porque cuando un Cristiano deja de cantar, es una señal cierta de que está a punto de caer de su varilla.
Para el Cristiano el gozo es el indicador de una atmósfera saludable. Cuando el gozo está presente, la esperanza, la fe y el amor, todos florecen en su momento. Sin embargo, si quitas el gozo, el abatimiento, la desesperanza, la incredulidad y la amargura, al igual que el temido hongo de las manchas negras, llenará de plaga todo lo que está tratando de crecer dentro y alrededor de tal Cristiano.

Si la canción en tu cabeza se ha silenciado, entonces puedo decirte que estás en el mayor de los peligros. Sal de ese lugar y, prontamente, atiende tu propio cultivo, no sea que la plaga de la muerte caiga sobre ti. He visto a muchos Cristianos que han caído de su varilla, con sus pequeñas piernas tiesas y estiradas en la nada. Escúchate a ti mismo esta noche. ¿Cómo está tu canto? ¡Pruébalo! Pues, verás, ¡el problema con los canarios complacientes es que, al final, se caen de sus varillas!

Medita: “Ustedes, que se sienten tan confiadas, en poco más de un año temblarán; porque fallará la vendimia, y no llegará la cosecha. Mujeres despreocupadas, ¡estremézcanse! Ustedes, que se sienten tan confiadas, ¡pónganse a temblar! Desvístanse, desnúdense; pónganse ropa de luto.” Isaías 32:10-11

Ora: Señor, perdona mi complacencia ante la ausencia de mi canto y perdona mi amor lleno de óxido. Ahora Señor, envía la fresca brisa de Tu Espíritu Santo a mis pulmones colapsados y libérame de todos mis pecados. Ven y pon una fresca canción en mi corazón para que pueda cantar el canto de consuelo de Sión y Tu poderosa alabanza. Te lo pido en el nombre de Jesús. ¡Amén!


No comments:

Post a Comment